La violencia sin guantes aterriza en el Prudential Center de Newark. Este sábado, BKFC 82 marcará el debut de la organización en Nueva Jersey con un cartel cargado de intensidad. Conor McGregor, socio y cara visible de la compañía, asumió el protagonismo en la conferencia de prensa final.

“Digan hola al gran jefe, Nueva Jersey”, lanzó el irlandés. McGregor insistió en el carácter universal del formato: “Todo el mundo entiende una pelea a puño limpio. Vamos a dejar nuestra marca aquí”.

El combate estelar enfrentará a Mike Perry con Jeremy Stephens. Perry, uno de los luchadores más violentos de los últimos años (15 peleas en UFC) defiende su título King of Violence en un duelo que promete intercambios violentos desde el primer asalto. “Estoy en el mejor momento de mi vida”, afirmó. Perry ha demostrado en BKFC que su resistencia y presión le permiten sobrevivir en peleas caóticas y sacar ventaja con la acumulación de golpes.

Stephens, curtido en UFC, no rehuyó el reto. “Los fans de Newark son los verdaderos ganadores. Este es mi tercer lleno en un año. Y siendo Halloween, voy a tallarlo antes de noquearlo”. Su estilo explosivo y su capacidad de conectar con potencia en ráfagas lo convierten en un rival capaz de decidir la pelea en un instante. Lo que se espera es un choque donde la resistencia de Perry se mida al poder de Stephens en corta distancia.

BKFC coronará una Reina de la Violencia

La coestelar tendrá un carácter histórico. Christine Ferea, campeona mosca, y Jessica Borga, campeona pluma, disputarán la primera Queen of Violence. La tensión entre ambas se hizo evidente en la previa. “Mis habilidades son mejores. Cuando le pegue, no creerá que soy de 125 libras”, aseguró Ferea, que apuesta por la velocidad y el volumen de golpes.

Borga replicó con dureza: “Estoy cansada de hablar. El sábado lo resolveremos en el ring”. La campeona pluma llega con ventaja de envergadura y potencia. Será una prueba de estilos, donde la movilidad de Ferea buscará contrarrestar el poder de Borga.

El cartel tendrá también a Jimmie Rivera, que peleará en casa frente a Timmy Mason. Rivera prometió representar a Nueva Jersey: “Voy a mostrar lo que significa pelear aquí”. Mason ironizó: “He estado huyendo de policías toda mi vida, ahora voy a pelear con uno sin problemas”.

Pero no todo salió como estaba planeado. La ausencia de Frankie Edgar, leyenda local, marcó la previa. Edgar, excampeón de UFC y símbolo de Nueva Jersey, iba a tener un combate de exhibición como despedida. Problemas médicos impidieron su participación, lo que dejó un vacío simbólico en la velada.

Edgar se había retirado en 2022, pero aceptó este homenaje como cierre en su tierra natal. Finalmente no recibió autorización médica. David Feldman, presidente de BKFC, lo lamentó: “Es una pena que Frankie no pueda estar, pero esta noche será histórica”.

Con McGregor al frente, Perry y Stephens disputando el King of Violence y Ferea y Borga inaugurando la Queen of Violence, BKFC 82 promete un espectáculo sin concesiones. La noche en Newark será recordada como el primer gran golpe sin guantes en la costa este, aunque con la sombra de Edgar flotando sobre el Prudential Center.

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